EXTREMADURA

Algunas de los productos y actividades más representativas de la artesanía extremeña son:

*  Los trabajos artesanales en madera: Las castañuelas de La Fragosa, Casares de Hurdes y Cereza.- Tallas y sillas de Gata.- Los tamboriles de La Fragosa.- Flautas de madera de Asegur.

*  Sombreros de bálago hechos de paja de centeno de Pinofranqueado y Erías.
*  Encajes de bolillos y ganchillos en Acebo y Hoyos.
*  Forjados de hierro en Gata.
*  Candiles de piedra (lava volcánica) en Aldehuela y El Gasco.
*  Cerámica artística, alabastros y cestería de castaño y mimbres en Baños de Montemayor.
*  Trabajos en cuero y forja artística en Hervás.

La provincia de Badajoz destaca, fundamentalmente, por su producción alfarera en barros rojos, que se concentra por otra parte, en pueblos como Salvatierra de los Barros, cuyas piezas se decoran con la singular técnica del “bruñido”, presentando formas muy características, y Fregenal de la Sierra. Otros centros alfareros de interés son Cabeza de Buey, Mérida y Talarrubias.

Cabe señalar, asimismo, Ia guarnicionería de Cabeza de Buey, la cuchillería de Don Benito y La Coronada, los bordados de Santos de Maimona y la fabricación de muebles de Badajoz capital y Jerez de los Caballeros.

Cáceres, sin embargo, presenta una panorámica artesana más amplia, pues cabe encontrarse desde los tradicionales objetos de cobre a los no menos tradicionales oficios de alfarero, cestero, bordadora, ebanista, tejedor, entre otros.

Guadalupe sigue manteniendo, a pesar de la progresiva mecanización que han sufrido sus procesos productivos, Ia producción de objetos de uso doméstico de cobre y latón, cuyos orígenes cabría encontrarlos en los siglos de dominación árabe. Baños de Montemayor destaca por su producción de muebles de mimbre, cestería y objetos de fibras vegetales en general.

Arroyo de Ia Luz y Ceclavín, que ha recuperado su tradicional producción de alfarería con decoración “enchinada”, son otros centros alfareros de interés. Hervás destaca por su producción de muebles de madera, así como de tonelería, cestería de castaño y muebles de mimbre; producción esta última que también se localiza en Montánchez.

Plasencia se caracteriza por sus trabajos de cuero y de forja y Montehermoso por los afamados sombreros de paja y sus bordados y deshilados al igual que los de Rosaleda de San Román, presentan influencias americanas.

En Cáceres capital, se trabaja la filigrana, destinada a los aderezos, dorados o plateados de los trajes regionales; así como se tejen las prestigiadas polleras y telas labradas. Por último, cabe señalar la elaboración de mantas en Torrejoncillo.

ARTESANÍA DE GUADALUPE (CÁCERES)

Guadalupe es uno de los centros artesanales más importantes de Extremadura.
La ciudad de Guadalupe está ligada desde el siglo XIV al Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe. En 1993 el Monasterio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En la actualidad esta población acoge a numerosos visitantes y peregrinos de todo el mundo.

En sus calles se desarrollan gran número de actividades comerciales y artesanales. Debajo de los soportales de la popular Plaza de los Tres Chorros se exponen interesantes muestras artesanas. Los productos artesanales típicos son: Los trabajos de calderería y orfebrería que son verdaderas obras de arte, las muestras de cerámica y los famosos bordados y encajes, así como la cestería en mimbre.

MUSEO de BORDADOS de GUADALUPE: En el antiguo refectorio del Monasterio de los Jerónimos se encuentra el Museo de Bordados, donde se guardan más de 200 piezas realizadas en el propio taller del Monasterio: frontales, casullas, dalmática ….

En la Sala Capitular se encuentra el MUSEO de MINIADOS, considerado uno de los mejores del mundo.

ARTESANÍA DE BADAJOZ

Badajoz es tierra de ceramistas y orfebres, también de artesanos de la madera y la forja (La fragua, cuna del herrero, del forjador, del cencerrero, del hojalatero y del calderero) También podemos encontrar bellos bordados (Mantas y sábanas bordadas con claveles y florones, pañuelos de mil colores, mantelerías y paños). y trabajos en cestería siguiendo la tradición de antaño en esta provincia extremeña.

La herencia recibida en los trabajos manuales de los artesanos de la provincia de Badajoz encuentra riquísimas referencias en las fraguas prerromanas, los mosaicos mediterráneos, los tapices medievales, los alfareros árabes, en los mimbres naturales, en los bordados, las tallas de madera, los barros cocido, los cobres y latones con vida propia, las maderas orientales, las pieles y cueros y el austero corcho. De padres a hijos esta rica herencia ha sido transmitida durante siglos.

La corteza de alcornoque se arranca cada nueve años y se convierte en cunas, útiles aperos y objetos decorativos.

Gastronomía de Extremadura

En el terreno de la carne cabe destacar la gran producción de subproductos del cerdo, como pueden ser los embutidos y la chacinería en general. La producción porcina alcanza en esta región unas altas cotas de calidad, debido a que crían la raza ibérica alimentada con las abundantes bellotas. Una de las zonas de mayor producción porcina es las comarcas de Montánchez: se cuenta como leyenda que los buenos jamones de esta tierra (jamón de Montánchez) se deben a la persecución que hacen los cerdos de las víboras. También son dignos de mención los chorizos extremeños, abundantes en ajo y en pimentón de la Vera. Algunos platos representativos son la cachuela extremeña o la chanfaina.

Como Extremadura es tierra de pastoreo, cabe destacar platos con cordero: caldereta de cordero, el frito extremeño o la gran variedad de quesos producidos con leche de oveja en las zonas de La Serena, Ibores, etc. La caza es abundante y cabe destacar la menor; uno de los platos de caza más conocidos son las perdices al modo de Alcántara, debido a una historia con las tropas francesas.

Entre los pescados caben destacar las diversas recetas elaboradas con bacalao en salazón, como el bacalao dorado, sobre todo aquéllas que contienen la denominación de vigilia, como el potaje de vigilia.